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Debido al impacto que tiene la Esclerosis Múltiple al ser la primera causa de discapacidad en adultos jóvenes, desde hace décadas ha habido mucha investigación e inversión en el desarrollo de medicamentos para su tratamiento.

Desde 1993 existieron los primeros medicamentos y ha habido un crecimiento exponencial, y eso ha permitido no solamente tener opciones de tratamiento en cuanto a diversos grados de eficacia, formas de administración y la posibilidad de que se puedan tratar también las formas progresivas de la Esclerosis Múltiple.

La Mielitis puede ser el primer síntoma de Esclerosis Múltiple o Neuromielitis Óptica.A su vez, es una inflamación de algún segmento de la médula espinal que produce debilidad de brazos y/o piernas, así como problemas de sensibilidad, dolor y problemas para el control de esfínteres.

La Esclerosis Múltiple (EM) es una enfermedad de adultos jóvenes. La edad del momento del diagnóstico puede influir en la progresión de la EM, aunque no es el único factor.

Aunque el diagnóstico de Esclerosis Múltiple (EM) puede tener lugar en cualquier momento de la vida, es más probable entre los 20 y 50 años, también según el tipo de EM.

La esclerosis múltiple remitente-recurrente (EMRR) suele aparecer entre los 20 y los 35 años de edad, mientras que la Esclerosis Múltiple primaria progresiva (EMPP) suele comenzar a los 40 años. Por otro lado, hasta un 10% de las personas con EM experimentan su primer brote antes de los 18 años.

𝗟𝗮 𝗘𝗠 𝗲𝘀 𝘂𝗻𝗮 𝗲𝗻𝗳𝗲𝗿𝗺𝗲𝗱𝗮𝗱 𝗰𝗿ó𝗻𝗶𝗰𝗮, 𝗽𝗲𝗿𝗼 𝗻𝗼 𝗺𝗼𝗿𝘁𝗮𝗹. La esperanza de vida de una persona con Esclerosis Múltiple es casi tan larga como la de una persona sin la enfermedad.

La investigación ha hecho que la EM sea una enfermedad cada vez más controlable y, hoy en día, las personas que conviven con la enfermedad pueden tener una buena calidad de vida.